VEGA SALVATIERRA, ZOILA
Durante la segunda mitad del siglo XX, las catedrales latinoamericanas abrieron sus fondos archivísticos y maravillaron a investigadores y aficionados con la enorme riqueza musical que guardaban sus muros. Se supo entonces que en dichos lugares, durante trescientos años, o más, se desarrolló una cultura sonora, que si bien reflejaba los usos europeos, pudo crear su propio idioma y adaptarse a las circunstancias de la conquista y la evangelización, en un continente que fue incorporado a la modernidad a marchas forzadas, creando espacios, que hasta entonces habían pasado desapercibidos.