Contemplar el ceilo desde los Andes siempre fue una pasión de los Incas. La mirada del sol, luna, las estrellas, fueron los referentes fundamentales para que los antiguos peruanos diseñaran sus calendarios; una invención para las estaciones, una forma de memoria y una organización de algo tan abstracto como la medición del tiempo.
El invierno llegó temprano, las lluvias se retrasaron, la temporada de cosecha se adelantó este año, etc. son sucesos muy importantes ya que constituyen la base principal de todo sistema de control y administración social. por eso existieron siempre, desde las primeras civilizaciones.
Las investigación del autor no es solamente una reconstrucción del calendario de los Incas, con la secuencia de fiestas, sino un tratado riguroso sobre la astronomía, la cosmología y los fenómenos sociales que los Incas asociaron al tiempo.