LUQUE BLANCO, JOSÉ LUIS
El presente libro tiene como base de desarrollo la obra de Frederick John Kiesler (1890-1965), arquitecto, escultor, pintor, diseñador de interiores, tipógrafo y poeta. No sólo fue pionero en el diseño de nuevas formas de escenarios, teatros, cines y galerías de arte, sino que trató de poner en un lugar vital a la fotografía, la pintura y la escultura. Colaboró con grandes figuras del Movimiento Moderno y de la generación de artistas más jóvenes del Nueva York de posguerra como Loos, Van Doesburg, Duchamp, Gorky, De Kooning y R. Rauschenberg, entre otros. Su arquitectura era una búsqueda continua de la visión total; para Kiesler, la composición es un fenómeno de tensión. Anticipa la experimentación radical de los años sesenta la noción de arte como un campo que contiene elementos dispersos. El desarrollo tecnológico posibilita la experimentación perceptivo-virtual de proyectos utópicos generados en el pasado. Una profunda revisión de éstos y su análisis en relación con el presente nos dan la clave de los trabajos que algunos arquitectos están proyectando y despejan incógnitas sobre la producción actual. Los últimos trabajos de Gehry, Hollein, Zahid, Lynn, Asymptote, Koolhaas así lo demuestran y deben mucho a este tipo de proyectos que en el momento de su concepción se toparon con la incomprensión característica de los que se mueven en el vértice de la pirámide descrita por Wassily Kandinsky en su obra De lo espiritual en el arte.
