G. KLICZKOWSKI
En esté número se da una visita a las principales casas realizadas por el Arq. Soyer desde 1970 hasta el 2010, por cada casa se encontraran los planos, la descripción del proyecto y fotografías de los pricipales detalles de cada una ellas.
Introducción de Emilio Soyer:
El tipo de proyecto que más he hecho en toda mi vida, han sido casas y es lo que más me gusta hacer, al proyectar una vivienda uno cuenta con más libertad, no tiene tantas restricciones como en el caso de otros proyectos.
Si te gusta el diseño, te tiene que gustar diseñar casas. Proyectar viviendas establece un nexo personal con el cliente, cuando trabajas para una persona específica, puedes disfrutar de un diálgo que no disfrutas cuando trabajas con un cliente en abstracto, permite una relación personal que enriquece, en gran medida el proyecto.
La arquitectura tiene un poder sobre la psique del hombre que es inportantísimo e innegable, cuando ingresas a un espacio inmediatamente sientes algo, y ese algo puede ser una sensación de agrado o desagrado. Creo que es una responsabilidad del arquitecto diseñar bien las cosas.
Cuando me preguntan por la inspiración artística del arquitecto, yo siempre respondo que en arquitectura la inspiración es el trabajo, hay una motivación, un motor, la pasión que uno siente por la arquitectura y ésa es la mejor inspiración que tengo.
La única forma de poner a prueba un proyecto es construirlo, es mi consejo para los arquitectos jóvenes, si te quedas con las cosas solamente en el papel y en la mente nunca las experimentas, en arquitectura es la única forma de sentirse mal por los propios errores. Para mí las cosas que salen bien, salen bien porque han sido pensadas, has examinado recorridos, cortes, elevaciones, proporciones, escalas; todo lo necesario para saber que lo que estás planeando está bien, nada en arquitectura es gratuito, llegar a un buen proyecto requiere de mucho trabajo. La concentración que necesitas durante un proyecto es importante, el arquitecto necesita visualizar muchas cosas, desde las partes más mínimas al todo; las ideas en arquitectura toman tiempo. Se necesita una gran pasión por el trabajo, porque te puedes rendir con facilidad, cansarte; para entrar en profundidad y lograr el proyecto que uno quiere, no hay forma de llegar sin pasión.