BIENAL INTERNACIONAL DE ARTE CONTEMPORÁNEO DE SEVILLA / THOMAS, JAMESCOORD. / ENWEZOR, OKWUIED. LIT.
Los sevillanos y sevillanas tuvimos la oportunidad de aomarnos por un tiempo limitado, a través de esa maravillosa ventana que fue la Exposición Universal de 1992, a lo que eran los hitos màs avanzados de la cultura mundial contemporánea, y la mayoría disfrutó de ella y no consideró sus expresiones elitistas ni alejadas de nuestra realidad o de nuestros gustos. Sevilla , los sevillanos y sevillanas, les cogieron el gusto a la creacióny a la cultura contemporanea, ya fuera arquitectura, artes plásticas o artes escenicas. El teatro de la Maestranza y el Teatro Central perviven como legado cultural de aquel la época.
Por eso ahora, y sobre esa base, queremos revitalizar aquel espiritu promoviendo una nueva política cultural en la ciudad; una política avanzada, asumiendo riesgos si es necesario. Una política que trascienda los modos provincianos y estancados.
Que en Sevilla era posible un gran acontecimiento relacionado con el arte contemporáneo, quedó ya de maniesto claramente en la anterior edición de la Biacs. si en sus primeros tiempos, cuando sobre ella aún pesaban las incógnitas propias de cualquier proyecto que empieza, el Ayuntamiento apostó por ella, con más razón lo hace ahora que ya ha demostrado lo que es y, sobre todo, lo que puede llegar a ser. El gobierno de la ciudad hace efectiva su estrecha colaboración con este evento y, sobre todo, trabaja par alograr que la biacs ocupe su sitio en la agenda de la ciudad y de los ciudadanos.
En Sevilla ya hemos demostrado muchas veces que lo contemporáneo no nos asusta. en muchas épocas dela historia, en esta ciudad se produjeron las creaciones más vanguardistas en todas las artes. Y ahora no tiene que ser diferente. En una ciudad con tan buen gusto como la nuestra, en la que la estética es casi una filosofía de vida, el arte en todas las facetas, y también el arte contemporáneo, tiene su espacio. Diríamos que en los huertos de la Cartuja encuentra suelo fértil para arraigar y crecer, y para dar sus frutos.