AA.VV
La intención original de este número de ESCALA fue la de cerrar un ciclo abierto con el número 223, centrado en edificaciones para universidades, y continuado con el número 230 que se ocupó del Hábitat Escolar. Este, por tanto, se dedicaría a los espacios educativos para la primera infancia.
Adicionalmente, y retomando el trabajo de la edición 214-Propuesta. Espacio para los niños, quisimos revisar proyectos urbanos y de arquitectura dedicados a la primera infancia. Resultó difícil encontrar edificaciones, diferentes a jardines infantiles o preescolares, en el que los niños hicieran parte de la reflexión central o de las ideas con las que cuales fueron concebidos. Incluso fue difícil encontrar espacios de recreación para niños.
Afortunadamente encontramos muy buen material escrito con reflexiones diversas sobre el espacio habitable, la conservación y transmisión de técnicas, las iniciativas de trabajo de sensibilización de los menores con la ciudad y el espacio habitable, del cual obtuvimos una excelente selección que conforma buena parte de esta edición.