AINARA SAGARNA
La edad a la que el niño urbano puede salir de casa de forma autónoma no ha dejado de aumentar en las últimas décadas. El juego libre e independiente del niño ha desaparecido en la ciudad. Desde diversas disciplinas se constatan estos hechos, a la vez que se insiste sobre la importancia que tiene en el desarrollo y la salud del niño la progresiva autonomía para salir del hogar, desde edades muy tempranas, hacia entornos ricos en estímulos. Tanto la forma de organizar la ciudad como el proyecto arquitectónico de la vivienda colectiva condicionan definitivamente las posibilidades del niño para el juego independiente fuera del hogar. Tras un análisis de la situación, a lo largo de la tesis se identifican cuáles podrían ser los aspectos concretos que necesitan una revisión y se sugiere en qué sentido debería darse la reformulación de los mismos.