FOCILLON, HENRI
La rebelión de Daumier, como hombre y como artista, fue inevitable; opuso a los sentimientos mezquinos, mediocres, crueles y cobardes, una visión enorme, auténtica, héroica, libre de las cosas. Lapintura moderna debe a Daumier el paso más difícil y decisivo en la conquista de lalibertad pictórica.